Pensábamos que Deportivo La Dulce desde el arranque seria el protagonista del partido pero de eso nada se vio. Un Newbery autentico y entero que desde el primer minuto se olvido que era visitante y comenzo a jugar el partido para ganarse el campeonato desde el primer minuto. Ya antes de los 3 minutos Enzo Astiz, clavo un sorpresivo disparo dentro del área que por poco no fue gol, Newbery golpeaba primero y avisaba que no iba a entregarse.
Dominio absoluto de la pelota, Zufriategui y Merlo por derecha comenzaron a encontrar huecos que con la ayuda de Mauad y Astiz inquietaron gran parte del tiempo, pero comenzo el show del juez, claras faltas que eran merecedoras de amarillas, ni siquiera eran cobradas, pelotas que eran tentacion para los tiros libres y jugadas preparadas solo para el arbitro eran un "siga siga". Hacían mostrar su descontento los propios jugadores dentro de la cancha y lo trasmitían sus hinchas que veían las injusticia de un partido que hasta allí era entretenido. Pese a ello Zufriategui tuvo una linda situación, también la tuvo Merlo y Mauad pero la suerte les decía que no.
Deportivo no inquietaba para nada a Newbery, su fuerte las pelotas paradas, eran controladas con normalidad y su juego de pelotazos a sus hábiles delanteros eran interceptadas una a una por Boldrini y Rodriguez que mostraron mucha solidez. Pero volvería el verdadero protagonista del partido a ensuciar la final, el arbitro cobra un penal que solo el vio, que ni los jueces de linea ven, ni la gente supo ni sabrá que fue lo que cobro. No tardo el arbitro en escuchar todo un repertorio de insultos por manchar un partido hermoso para ver, donde ambos equipos se disputaban la corona.
Su numero 2 tranformo en gol clavando un solido tiro a la derecha de Coppola que nada pudo hacer. Pasada los 30 minutos de los 35 luego de que fouls tras fouls a nuestros jugadores, La dulce se llevaba los tiros libres, antes las protesta de Andrevich decide expulsarlo. Unos minutos mas donde el partido era mas caliente que el agobiante calor que hacia en la cancha, se terminaba un primer tiempo injusto porque Newbery fue un absoluto dominador y el local solo un gran espectador.
La segunda parte Newbery tendría que ir a sacar un resultado que los lleve a los penales, no encontró un gran fútbol pero siempre empujo hacia la portería de La Dulce, donde su defensa se limitaba a cortar una y otra vez con falta, claro que las amarillas el arbitro no las usaba. Zufriategui tuvo una chances de pelota parada, luego la tuvo Mauad en sus pies pero el tiro paso muy cerca del ángulo. Newbery tuvo una situación muy clara, luego de una habilitacion a Astiz quien define ante la salida del arquero pero la pelota pasa muy cerca del poste izquierdo.
Mientras se consumian los minutos, el partido fue trabado pero Newbery con un coraje y hambre, ganaba cada pelota y la disputaba como si fuera la ultima, Behotas y Morales distribuían la pelota y intentaban penetrar una defensa que se veía acorralada por el ataque aurinegro, ya con el ingreso de Barraza por Casais, Newbery pudo llegar por izquierda y así tener mas variantes pero lo que no terminaba en foules alevosos de expulsión, terminaban en jugada que no llegaban a buen puerto. La dulce tuvo una chance clarisima de liquidar el partido pero Coppola saco un brillante mano a mano.
Transcurrían los últimos minutos, ya eran los finales y Newbery lo busco y lo busco, hasta tuvo el gol Mauad en sus pies pero la pelota paso tan cerca del palo que casi llego a rozarlo, se desvanecían las chances, ni de corner ni de tiro libre se pudo concretar y así el partido llego a su fin, dejando al local con la victoria y el campeonato, desazón en todo Newbery que no culpo al rival pero si a un arbitro que no estaba capacitado para dirigir una final, donde desde el primer momento le quedo grande la segunda final y fue el factor determinarte de inclinar la cancha hacia un lado.
Luego de finalizado el partido y con unos ánimos calientes, creemos que Deportivo La Dulce hizo mal en dejar ingresar a la hinchada dentro del campo de juego, donde todavía nose habían retirado nuestros jugadores, donde las gastadas en patota a jugadores que recién acaban de perder una final eran un condimento explosivo para que se produzca tumulto, que se podría haber evitado, para agregar un dato mas todavía fue que el arbitro se quedo con los locales seguramente festejando una victoria en conjunto.
Para agregar la impotencia de ver llorar a nuestros chicos, donde alguien viene a tirar por la borda todo el trabajo, el sacrificio y el esfuerzo de un grupo bárbaro de chicos y de cuerpo técnico que dejaron el alma, el corazón, el sudor y hasta las lágrimas de ver truncado un sueño que lo fueron contruyendo cada día y se lo desmoronaron en una hora. Solo estas cosas nos hace ver lo privilegiado que somos de tener unos chicos que sienten la camiseta con un amor, queremos que sepan cada uno de ellos que nos dan un orgullo tremendo tenerlos en nuestro club y cuando nos dejen les demostraremos que son capaces de hacer y de lograr.
Juan S.Torres para JNFC.blogspot.com
